Siempre he dicho que los extremos no son buenos para nada, y hoy os voy a contar una pequeña anécdota. Hace casi 2 meses que me incorporé a trabajar y abril fue un mes muy caótico. En mayo, ya me pusieron con un grupo donde nuestro objetivo estaba claro, aunque por circunstancias ajenas a nosotros pues hay días en los que tocas tres campañas totalmente distintas, con distintas ofertas y distintos aplicativos, como en el caso de hoy. Pues bien, nosotros tenemos un ranking, y en el grupo que estoy se "supone" que es lo fácil y voy la última, sin embargo en lo difícil soy la primera.Aquí los dos extremos de mi arduo trabajo. No tengo explicación para esto, pues si vendes lo difícil debería ser más fácil vender lo fácil, valga la redundancia.
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