Con este blog deseo expresar mis sentimientos, tanto del corazón como los más viscerales, que suelen ser de mi tierra.

Ya se ha publicado un par de cosas mias en este medio, gracias a un amigo, y ahora por fin me he decidido yo a publicar un blog.

Espero que os guste.

Por cierto, se admiten comentarios. También criticas constructivas, por supuesto.

Muchas gracias.

Anchama.

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Anchama al natural

Presente, pasado y futuro.

PACIENCIA DE CARA AL PUBLICO 14:22


Es increible la paciencia que se ha de tener con algunos clientes cuando se trabaja de cara al público.
Ayer, vino un señor con su yerno a comprar una placa de cocina, y como sé cómo va el tema, lo primero que hice fue preguntarle por la marca que tenía, pues hay una marca en cuestión que tiene medidas exclusivas, y el señor me dijo que tenía esta marca  y que él se llevaba "la que le diera la gana". Después de mis explicaciones profesionales seguía en sus " r que r", asi que le dije que sí, que yo le vendía lo que él quisiera pero bajo su responsabilidad y que yo en observaciones le iba a poner que estaba informado de todo, pues si viene a descambiarla (cosa que si o si, haría porque no le vale otra) yo no iba a cargar con  las quejas de "ella no me dijo nada".
Empecé a enseñarle marcas, y cuando llegamos a la española, empezó a desvariar y reirse de la desgracia de tantos y tantos trabajadores que van a la calle, y además, que no quería nada con vascos ni catalanes. Estuve a punto de decirle, "Sr. espere que le va a atender otro compañero", pero como soy una profesional me la tragué.
Después venga a hablar de política, y sacarme de mis casillas, pero tres cuartos de lo mismo, yo callada, hasta que reventé y le dije que yo iba allí a vender electrodomésticos y no ha hablar de política, pero que si quería me esperara a las 10 cuando saliera de trabajar y hablabamos todo lo que tuvieramos que hablar.
Ya por último, después de mucho tirarse el moco de que él tenía marcas de alto prestigio y pedirme presupuesto, etc...llegó a la conclusión de que se iba a tener que llevar la que yo decía pero que tenía que dar el visto bueno su señora.
Conclusión: Me tocó bien las narices, aguanté el tipo, y el señor no se llevó nada, asi que me tocará otro día aguantarle o bien, estaba aburrido en casa y no tenía otra cosa que hacer que ir un sábado por la tarde a un centro comercial a dárselas de que él sabe más que los profesionales que trabajamos alli.