Con este blog deseo expresar mis sentimientos, tanto del corazón como los más viscerales, que suelen ser de mi tierra.

Ya se ha publicado un par de cosas mias en este medio, gracias a un amigo, y ahora por fin me he decidido yo a publicar un blog.

Espero que os guste.

Por cierto, se admiten comentarios. También criticas constructivas, por supuesto.

Muchas gracias.

Anchama.

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Anchama al natural

Presente, pasado y futuro.

VICTIMAS FORMADORAS 10:00

El lunes 23 de octubre, después de unas maravillosas vacaciones sin descanso, me monté en un tren camino de Madrid, pues a las 9.30 de la mañana estaba convocada en el Ministerio del Interior para recibir un curso junto a otras Victimas del Terrorismo. 

Llegué unos minutos tarde, pero fue debido al tráfico que hay en Madrid. 

En la puerta me estaban esperando dos trabajadores sociales, Fernando con el que he hablado varías veces por teléfono y me recibió como si me conociese de toda la vida, y Mónica, con la que he estado gestionando todo el trámite. También en el acceso de control estaba otra victima que me presentaron (Eugenia). Hicimos el trámite de control y para dentro. 

En la sala, dispuesta en V se encontraban sentadas otras victimas de distintas edades, ciudades, estatus...también la Subdirectora Paloma y  Belén. Al fondo, estaba nuestra formadora María, que ya estaba empezando. 

El cometido del curso no era decirnos lo que tenemos que contar, sino cómo crear expectación a lo que vamos a contar, cómo debemos mirar, hablar, movernos para que nuestros oyentes nos presten atención. 

Yo no había dormido ni tres horas y me daba mucho miedo quedarme dormida, pero si he de ser sincera, no pegué ni un cabezazo y eso era por cómo nos impartieron el curso y también por los testimonios de las otras victimas. 

Sin nombrar a ninguno, pero por hacer un resumen de lo que allí se contó:  

- Una viuda relató cómo asesinaron a su marido y tuvo que contarle a sus hijos que ya no verían más a su padre. Cómo ha tenido qué vivir. 

- Otra mujer, nos contó cómo su marido apareció en una lista de Eta y se tuvieron que ir de un día para otro del País Vasco.

- Un hombre, contó que era Guardia Civil, y cómo perdió la pierna, aunque pudo perder la vida. A partir de ahí se agarró a la vida, estudió y ejerce otra profesión. 

- Otro hombre, militar, no sufrió el terrorismo por llevar el uniforme, sino que le pilló de lleno el 11M. 

- Hubo una mujer, que contó como se llevó ella y su familia más de una semana buscando a su hermana y se cuñado. Ambos fallecieron en los atentados del 11M. 

- Una historia que me impactó mucho fue la de un chico, que estaba trabajando en un país extranjero, y le pilló en medio de un atentado. Fue una odisea volver a España. Desde entonces, tiene una visión de la vida que muchos ya quisiéramos. 

- Otro hombre, también victima, se emocionaba al contar su relato y es que aunque pase el tiempo la herida siempre está ahí. 

- Una mujer, se quedó viuda en el 11M y contó cómo ha tenido que sobrevivir a ese horror.

- Hubo con una victima que me sentí totalmente identificada, pues su historia y la mía, son similares, con final diferente: a su padre lo asesinaron. 

- También hubo dos victimas de 3ª generación, pues son nietas de los asesinados.  Ambas hacen una gran labor siguiendo contando lo que les pasaron a sus abuelos. Ambas son de Victimas mediáticas, pero son muy sencillas.  Me impactó de sobremanera el relato de una de ellas, pues es victima doblemente.  Y a la familia de la otra, las victimas le debemos mucho.

Contar nuestro relato en dos minutos es imposible, pero eso a María le dio pautas para que lo hagamos bien cuando vayamos a los institutos. 

Hubo una segunda parte donde mejoramos muchísimo, pero es imposible no emocionarte cuando tienes que expresar lo que viviste el día que te cambió la vida. Y aquí estábamos en familia, con la "familia del dolor" como yo digo. Aquí nos entendemos todos. 

En la comida, pudimos interactuar un poco más, pero es verdad que el tiempo es breve cuando hay obligaciones. 

Al finalizar el curso nos despedimos todos, pues aunque fue poco más de un día, nos llegamos de una manera muy visceral. 

Ahora queda preparar mi relato y esperar a que me llamen para ir a colegios e institutos y contar mi relato a los estudiantes de esta generación para que vean que ha ocurrido en España, que no hace mucho en este país, España, se mataba por llevar un uniforme o pensar distinto y eso tenía unos consecuencias en la familia. Que no se críen en el odio y evitar que vuelva a ocurrir.