Hoy toca comer con la AVT. Es la primera vez que puedo ir a un acto con ellos, pues el año pasado me pilló trabajando y los actos que hicieron fueron lejos de mi ciudad. Este año, por el contrario, me pilla la comida a 15 minutos de mi casa y podré ir, aunque después me toque ponerme mi uniforme de cucaracha y empezar mi labor profesional, pero mirando en positivo, podré ir, y disfrutar de una velada, con gente que ha pasado por el mismo horror que mi familia y yo. Es una manera de estar unidos y de que no se nos olvide.
No hay comentarios:
Publicar un comentario